Sueño y Frustración

Ella se llama Sueño,

pero se apellida Frustración.

Es de las chicas que brincan creyendo 

que pueden alcanzar el cielo

pero antes de las 6 ya están golpeando

el suelo porque no lograron alcanzar ni un rascacielos.

Sin embargo yo no conozco a ningún soñador 

que no se haya frustrado,

se me rompe el alma cuando veo a algunos

que tienen la frustración y el fracaso tatuados,

pero ella es otro asunto,

su apellido no le hace doblar las piernas por más de 37 horas,

después de ese tiempo se lava la cara

y sale a gritarle al mundo

que ya está lista para volver a empezar.

Su peor error es ser tan idealista

porque se ha tomado doble ración de ganas de salvar un país

y derrocar al sistema.

Por el día se ve tan despierta y activa

que cualquiera pensaría que no es la misma 

que llora por las noches y se tapa los ojos con las manos

diciendo: No lo logré.

Pero ella no sabe que después de esa frase

va un Pero lo intenté 

y eso significa más, mucho más.

Significa que ha dejado de formar parte 

del grupo de quienes esperan a que sucedan las cosas,

que ha tomado la vida con agallas y se ha enfrentado a ella

sin pedirle permiso o perdón,

celebra cuando gana

pero se frustra cuando no logra lo que quiere

y es que ella tiene tanta fe

que no ha dejado escapar a ninguna estrella,

velita, 11:11 o diente de león,

ha secuestrado a todos.

Ojalá hubiera muchos como ella,

soñadores,

ojalá hubiera menos como ella,

frustrados 

aunque sea por sólo 37 horas

el fracaso escuece bastante

y soñar duele lo doble

pero vale la pena.

— María Celeste R.