¿Qué hay detrás de los ojos tristes?
Hay un gran vacío, o quizá, hay una enorme añoranza por lo que se ha perdido.
Un amor fugaz o uno demasiado lento.
Una persona bailando entre las pupilas o una ausencia que se expande hasta acabar con la vista.
Un corazón roto o uno que trae puesto una armadura a prueba de sonrisas que roban suspiros.
Hay miles de historias de amor que merecen ser contadas.
Un adiós o un hasta luego que nunca llegó, un hola o una bienvenida que desgarró el alma.
Voces diciendo “quiero un tiempo” o un “ya no te quiero”. Hay remembranzas que muestran lo prohibido o lo acabado, que mantienen vivo el dolor que se creyó haber exterminado. Pero sigue tan latente que provoca un mar de lágrimas mezclado con melancolías, lágrimas que intentan apagar el fuego para que el corazón no termine hecho cenizas.
Se encuentran esos sueños rotos que traté de coser con el hilo de la esperanza.
Las metas personales que se escaparon después varios intentos fracasados.
La sensación de encontrarte en un laberinto co